¿Cómo llegó ser tan tarde tan pronto?

 

"¿Cómo llegó ser tan tarde tan pronto? Es noche antes de que sea tarde. Diciembre está aquí antes de que sea junio. Dios mío cómo ha volado el tiempo. ¿Cómo llegó ser tan tarde tan pronto?”

-Dr. Seuss

 

 

Lo que podría parecer un pequeño acertijo cursi, en si se ha convertido en la realidad de nuestra vida actual. Antes de que te des cuenta, es de noche, antes de que te des cuenta, es lunes de nuevo, antes de que te des cuenta, es el final del año y sigue con cada temporada, cada día festivo, año tras año. Vivir esta vida acelerada preocupándonos por lo siguiente y lo siguiente nos ha dado realmente poco tiempo para disfrutar del presente.

 

Como había mencionado en mi post anterior durante mi almuerzo con Carlos tuve una conversación inesperada que me hizo darme de cuenta de esto y si soy completamente honesta con ustedes, terminé llorando un poco. No porque estaba siendo súper emocional o algo así, sino simplemente porque me di cuenta de que en realidad me estoy perdiendo lo que realmente importa en la vida y eso es poder disfrutar de mis hijos mientras crecen.

 

Recuerdo haberle dicho a Carlos: "... Mira a Caleb, antes de que nos demos cuenta va a tener 5 añitos (en realidad ya tiene 5), ya está en la escuela y antes de que nos demos cuenta va a ser demasiado grande para querer que lo abrace y lo bese. Será demasiado grande para querer jugar conmigo". Fue en ese momento que realmente me di cuenta de que me estaba perdiendo momentos bonitos con mis niños por el deseo de poner las cosas en orden.

 

Me gustaría poder tener todo en mi vida en orden. Que mi casa pueda estar impecablemente limpia, que pueda tener un lugar específico y etiquetado para todo, que la ropa se lavará y se guardará de inmediato. Que tendré tiempo para jugar, ayudar con la tarea, cocinar, bañarlos, leerle un cuento a la hora de dormir todas las noches después de estar sin parar de hacer cosas durante todo el día. Todo mientras mantengo un estilo de vida saludable en todos los aspectos, física, mental y espiritualmente. Me gustaría que el ser una "súper mamá" o lo que hemos imaginado ser una "super mamá" fuera real, pero no lo es.

 

Por lo tanto, es nuestro trabajo apoderarnos de lo que realmente es importante, que es la familia a nuestro lado, o la familia que estamos construyendo y creciendo, básicamente las personas con las que estamos viviendo la vida. Disfruta y aprecia el presente que  estás  viviendo. No te dejes llevar tanto por el futuro que te pierdas momentos especiales en los que no podrás volver atrás cuando estés en ese mismo futuro en el que estabas construyendo tan enfocado.

Dicho esto, no estoy diciendo que no tengas sueños para el futuro, o que no trabajes por un futuro mejor. ¡Haz el trabajo! Simplemente asegúrate de estar dispuesto a estar bien, aunque tomes un poco más de tiempo para llegar allí. Porque, hoy en lugar de hacer ciertas cosas, jugó con sus hijos cuando le pidieron que jugaras con ellos o se sentó a ver una película con su pareja cuando le pidió que se sentara con el/ella, o agarró una taza inesperada de café con una amiga/o. Y no porque lo programes con anticipación y ya habias sacado tiempo para eso, sino simplemente porque quieres disfrutar de ese tiempo con ellos en el momento en que lo están buscando, o lo necesitan. Esto puede ser que no sea algo que puedas hacer cada vez, y eso también está bien, pero recuerda que a veces son esos momentos inesperados que terminan siendo los tiempos que en su mayoría son apreciados y los mejores recuerdos son hechos.